Delicioso plato de seitán que se come solo. Es muy importante que cueza bien para que quede blandito. ¡Espero que os guste!
Este plato se lo dedico a Crisha, que también le encanta eso de aliñar los guisos con whisky o lo que se tercie. ¡Te quiero pequeña!
Ingredientes para 3 personas:
1 bola de seitán (350 gr. aproximadamente)
16 champiñones frescos
1 cebolleta grande
2 dientes de ajo enteros
3 cucharadas de aceite de oliva
medio vaso de whisky (brandy, coñac, vino blanco...)
medio vaso de agua
1 pastilla de caldo vegetal
1 chorrito de salsa de soja
1 cucharadita de pimienta negra en grano
Elaboración:
Pelamos la cebolleta y la cortamos en gajos. Reservamos.
En una cazuela calentamos el aceite y doramos el bloque de seitán entero con el diente de ajo. Cuando esté bien doradito por todas partes lo retiramos a un plato junto con el ajo.
Echamos la cebolla a la cazuela y la salteamos unos minutos a fuego fuerte. Añadimos sal, tapamos y dejamos que se haga a fuego bajo unos 15 minutos o hasta que esté transparente.
Mientras se hace la cebolla aprovechamos para limpiar los champiñones y quitarles la base, dejamos solo los sombreritos.
Cortamos el seitán en dados grandes y lo incorporamos a la cazuela. Subimos el fuego y añadimos los champiñones, la pimienta y los dientes de ajo enteros (que ya estaban doraditos).
Le ponemos un chorrito de salsa de soja y el whisky. Salteamos el conjunto removiendo un par de minutos, ponemos el agua y la pastilla de caldo.
Cuando comience a hervir bajamos el fuego al mínimo, tapamos y dejamos que se haga unos 30-40 minutos o hasta que veamos que el seitán está blandito.
Servimos caliente y podemos acompañerlo de cuscús, de arroz, patatas o verduras al vapor, así lo convertimos en un platazo único ;)
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